Originaria del ejido Libertad, cuarta sección del municipio de Cunduacán, Jessica abordó el autobús con la esperanza de llegar a salvo a su hogar, sin imaginar el trágico desenlace que les aguardaba.
El trayecto parecía transcurrir sin incidentes hasta que, al llegar a Santa Rosa, la unidad fue interceptada por integrantes del grupo delictivo "La Barredora", desatando un violento ataque que resultó en el incendio del autobús y otros seis vehículos en diferentes puntos del municipio.
El origen del ataque se remonta a un enfrentamiento en el poblado C-21, donde las fuerzas armadas llevaban a cabo el operativo 'Tabasco Seguro'. El resultado fue la captura de cuatro presuntos delincuentes y la muerte de dos más, incluido el líder local, Luciano "N", apodado El Topo.
Testigos relataron que, atrapados dentro del autobús en llamas, Jessica y su hijo no lograron salir a tiempo. Ante la desesperación, Jessica tomó una decisión heroica: lanzar a su hijo por una ventana para salvarlo de una muerte segura. Sin embargo, ella misma no pudo escapar y sucumbió al fuego.
Videos que circulan en redes sociales muestran el valiente sacrificio de Jessica mientras su cuerpo es consumido por las llamas, mientras su hijo fue rescatado con una fractura en el brazo y entregado a sus familiares.
El cuerpo de Jessica fue recuperado por la Fiscalía General del Estado (FGE) para realizar pruebas genéticas y posteriormente ser entregado a su familia para su digna sepultura.