La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha designado a la enfermedad mpox, anteriormente conocida como viruela del mono, como una emergencia sanitaria internacional por segunda vez en dos años.
Este brote reciente, que tuvo su origen en la República Democrática del Congo, ha causado la muerte de al menos 450 personas. La enfermedad se ha expandido a varias regiones de África central y oriental, y los científicos han señalado con preocupación la rapidez con la que se propaga y la elevada tasa de mortalidad de esta nueva variante. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS, expresó su gran preocupación por la posible expansión continua y urgió a una "respuesta internacional coordinada" para enfrentar la crisis.